Mylo Xyloto.

Afrontaba con cierto escepticismo la escucha de Mylo Xyloto tras un último y muy exitoso -comercialmente hablando- Viva la Vida. Creo que la primera canción que escuché de Coldplay fue su archiconocida "Clocks" de su fantástico segundo largo A Rush Of Blood To The Head que, junto con Parachutes son lo mejor que han hecho y harán. X & Y todavía guardaba magia en sus canciones, pero la diversidad de Viva la Vida nunca convenció a casi nadie. Con este panorama, llegaba el pasado septiembre este disco con un título que, según el grupo, no significa nada (posteriormente reconocerían su error). Sus primeros adelantos, "Major Minus" y "Every Teardrop is a Waterfall", el primero sin pena ni gloria, pero la segunda pegadiza a más no poder gracias a ese ritmo que creían plagiado de "Ritmo de la Noche" de Mystic, aunque después aparecería el autor original de la canción en los créditos. Paradise, acompañada de ese simpático videoclip, también se clava en tu cabeza a la primera. A pesar de todo. Y digo a pesar de todo porque si pretendes disfrutar de esta nueva versión del grupo, tienes que hacerlo sin complejos. Coldplay llena estadios y plazas de toros (lo hizo con Las Ventas y lo hará con el Calderón) y colabora con divas como Rihanna.

Volviendo al disco, hay un intento por intercalar canciones más mainstream y electrónicas con otras más acústicas y, en mi opinión, de lo mejor que podemos encontrar aquí. Cuando escucho temas como "Us Against The World" o "U.F.O", por un momento (enfatizo, por un momento), noto la sencillez y la belleza que impregnaban cada una de las canciones de Parachutes y no puedo evitar emocionarme. De hecho, tiraron a la basura un disco acústico entero y publicaron Mylo Xyloto.

La verdad, no sé si prefiero que sea así o no. Coldplay no son lo que eran y pretenderlo sería un error.

En definitiva, muy disfrutable en días soleados. A pesar de todo. Algún día les veré en directo y saldaré mi cuenta con ellos.

Puedes escuchar Mylo Xyloto a través de Spotify .

Hurry Up, We're Dreaming.

Conocí a M83 gracias a Indiespot . Habían elegido Midnight City como canción más pegadiza del año, cosa que, al escucharla, pensé que no era para tanto. Estaba bien, pero me parecía excesiva tal condecoración. No obstante, a la segunda escucha, me quedé prendada del extraordinario solo de saxo final, y a la tercera, estaba totalmente prendada de ella. Tanto, que aún disfruto escuchándola y no la he quemado. Animada por este descubrimiento, me bajé Hurry Up, We're Dreaming, doble álbum denso, donde prácticamente ninguna canción llega al nivel 'hit' del single, pero muy completo y lleno de matices. Canciones como Wait o Soon, My Friend, que crecen hasta convertirse en pura épica, son dignas de ser escuchadas al menos una vez en tu vida.

Puedes escuchar su último disco a través de Spotify .

The Black Keys en España.

Me rondaba la cabeza la idea de subir alguna review de discos que he estado escuchando últimamente, cuando me he enterado esta mañana de que The Black Keys (por fin) vendrían a España en fecha única el 28 de noviembre al Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid. Sabíamos que tenía que pasar. Si no les traía algún festival, acabarían viniendo con concierto propio, y así ha sido. Me hacía gracia que al comentarlo con una amiga, dudara de que llenaran un recinto como el Palacio (15.000 personas). Pero teniendo en cuenta la repercusión de sus dos últimos discos, las entradas volarán, no me cabe ninguna duda. Personalmente, me uniré a la gran mayoría que irá, básicamente, por su último disco. Hitazos como Lonely Boy o Run Right Back, que adjunto aquí abajo, son razones más que de sobra para ir. Ese blues rockero bailongo que infecta El Camino, una vez te engancha, no lo puedes dejar.

Las entradas saldrán a la venta el próximo 26 de abril a partir de las diez de la mañana a través de las redes habituales de Ticket Master y Doctor Music. Los precios oscilarán entre los 42€ de pista y los 32, 36 y 46€ de grada. Si convenzo a alguien, allí estaremos.